Un momento todos a la mierda los mando ahora, no es rabia, es disconformidad y desesperación, angustia por un porvenir no deseado por los demás y falta de comnprensión del medio... No es tampoco que no pueda ventilarlo, es sólo que no quiero hacerlo, dejen guardarmelo, dejen que mi corazón estalle: big bang y big crunck, deja que los átomos de la fusión se estabilicen solos, que si no pueden, yo seré la encargada de sumergirlos en agua, que no moriran por levantamiento de polvo, pero quizás sí por una gran ola, es lo de menos pues aún no será lo suficientemente grande como para limpiarles un poco la escoria que muchos tienen adherida al alma, mis ojos están ardiendo, es una de las pocas cosas que no logro controlar, no me gusta la hipocresía me gusta la de frente no irónica ironía, y si siento que callo es porque a veces sobran palabras o simplemente estoy craneando el siguiente golpe, ahora: nada, no tengo armas, las he ido votando en el camino, soy mi único elemento de combate en ésta batalla repugnante, los puentes que permiten cruzar a la aceptación no me interesan, no soy amiga de la conformidad, del confort sí, considerando éste según aspiraciones propias, no me han promovido a una educación donde dentro de los ramos está la filosofía? Sé lo que significa esa palabra y por eso la aplico, no manejo su amplitud, pero sí su significado, no importa el peso significativo de la comunidad, importa el amor al arte, a mi arte, no quisieron que fuera artista dejando nuestro vínculo entre una higuera y una rosa?, Ahora permitan que se explaye mi cuerpo, que en todo caso es lo de menos, se lo regalo a quien lo quiera, ahora no lo necesito, lo dejaré recostado en el camino agradeciendo su compañía mientras me desligaba de él, ya no hay relación simbiótica, lo dejo en paz para que devuelva sus nutrientes a la tierra, ahora regalo mi cuerpo y lo dejo reposando en el camino tapado con un manto fino de estrellas y con la cama rebosante de Gaia, le agradesco a mi cuerpo y lo castigo inhibiendo mis receptores nerviosos para que no me afecte lo que sucede, para que sus palabras me queden inocuas, para que exista quorum en el parlamento de las ánimas de mi organismo, para no percibir la rabia ni los colores, para no sentir sabores ni excitaciones, para no vivir como materia...
Mis chakras son tornasoles, se asemejan a las hojas de mis Aser, me emocionan cuando logro contemplarlos, tan distintos según la estación, tan distintos según el sol, porque brilla la luna y la veo entre rendijas, porque me regala las noches tranquilas cuidando mis pensamientos, los absorbe como esponja y se permite enjaular mi nuve, me deja como nueva para una eterna mañana en la que todos ven sonrisas de perlas, como si no hubiese rastro, no quedan cenizas porque nunca termina el incendio, no ven cenizas porque están tristemente enfrascadas en las perlas, por eso amo a la luna, le gusta el el silencio, por eso somos hermanas, me cuida y yo le acaricio la triste cara, que no es pesebre como muchos dicen, eso es un invento del lucero del alba para restarle importancia y brindárselo a sus fulgurantes astas, por eso no le cuento nada, solo sabe y yo sé lo de ella, por eso la extraño las noches con su ausencia, aunque no reprocho a, de acompañantes, estelas. Y así se enerva mi furia, fobista, no de miedos, se embarca buscando tan sólo más compañeros lunares, que me regalaron Marte y soy dueña de Venus, pero el universo es grande y no tengo control sobre todas las galaxias regentes para conseguir un minuto de oido en sus corazones, ten en cuenta que no soy conocedora de todas las constelaciones pero les pido a los dioses que me las enseñen y por eso estoy abierta a lo que se viene, aunque no lo entiendas, son las profesías hechas con el fin de entender a lo que se refieren y no pretendo decifar el acertijo ya sin soluciones los problemas, por eso recopilo información y no entiendo el egoísmo frente a mis espectativas, por eso amo la luna aunque tenga que verla entre rendijas...
Mis chakras son tornasoles, se asemejan a las hojas de mis Aser, me emocionan cuando logro contemplarlos, tan distintos según la estación, tan distintos según el sol, porque brilla la luna y la veo entre rendijas, porque me regala las noches tranquilas cuidando mis pensamientos, los absorbe como esponja y se permite enjaular mi nuve, me deja como nueva para una eterna mañana en la que todos ven sonrisas de perlas, como si no hubiese rastro, no quedan cenizas porque nunca termina el incendio, no ven cenizas porque están tristemente enfrascadas en las perlas, por eso amo a la luna, le gusta el el silencio, por eso somos hermanas, me cuida y yo le acaricio la triste cara, que no es pesebre como muchos dicen, eso es un invento del lucero del alba para restarle importancia y brindárselo a sus fulgurantes astas, por eso no le cuento nada, solo sabe y yo sé lo de ella, por eso la extraño las noches con su ausencia, aunque no reprocho a, de acompañantes, estelas. Y así se enerva mi furia, fobista, no de miedos, se embarca buscando tan sólo más compañeros lunares, que me regalaron Marte y soy dueña de Venus, pero el universo es grande y no tengo control sobre todas las galaxias regentes para conseguir un minuto de oido en sus corazones, ten en cuenta que no soy conocedora de todas las constelaciones pero les pido a los dioses que me las enseñen y por eso estoy abierta a lo que se viene, aunque no lo entiendas, son las profesías hechas con el fin de entender a lo que se refieren y no pretendo decifar el acertijo ya sin soluciones los problemas, por eso recopilo información y no entiendo el egoísmo frente a mis espectativas, por eso amo la luna aunque tenga que verla entre rendijas...