Éste fue tu último aliento, representa tu cuerpo alto y ergido. Éste fue tu último aliento, que brindome una imagen tierna de tu contorno, que el crespúsculo bello pasa a segundo plano una vez que estás tú, que lo cálido de las aguas anaranjadas por el sol nos soba las caras y besa nuestras frentes. Éste fue tu último aliento sobre el pasto y sobre mi figura, determinado lo tenía el frío que trae la noche y la gélida mañana acompañada de la brisa, el rocío congeló lo que quedó de nuestros cuerpos y las esencias suaves abandonadas de caricias se rieron nerviosas de lo dulce de nuestras bocas y ahora me preguntó: ¿por qué te amo aún? o es que en realidad no es así? lo que tenemos, lo que hemos perdido, lo que adquirimos si las manos se rozan ya sin ganas ¿Podemos, incluso, pelear? El peor rincón, y flotan nuestros besos, quiero cazarlos pero no los alcanzo quiero cazarlos y plantarlos en nuestros labios, pero mi corazón está en una llanura que antecede a cuatro precipicios y mis pies se encuentran impedidos de moverse las reflexiones infantiles que salen de mis manos me enervan y me dan ganas de que éstan posean más fondo y contenido, pero no me concentro en más que tu último aliento y el vaivén de las efigies observadas por la multitud, estamos comprendidos en el galpón rodeados de leones, la pretensión de los dioses y la armonía suave acompaña el término del aire, agitan los aullidos de la ira contenida y la tranquilidad del lago estancado se subleba por la ayuda de la luna en las mareas, nos bañan y nos bañan con la calidez de lo cercano en otoño, las cuerdas de la canción nos refresca, es como tu aliento.... tu voz alberga lo grave del desbalance cerebral. A centímetros de tu boca, respiro lo poco que queda de tu aliento...
viernes, octubre 12, 2007
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